26 febrero 2005

Sentimental

Te extraño. Nos vamos a ver pero me impaciento. Y salgo con un taco de pool a reventarle la cara al primer idiota que me cruce porla calle, y esté haciendo cualquier cosa. Aunque sea mirando al piso, y desperdiciando su chica vida en un piso al que ni siquiera estamos pegados. Y mandarlo a volar por el espacio sideral en un viaje que lo deje sin aire y lo encienda hasta el sol. Conseguir un martillo neumático y hacer con baches un foso alrededor nuestro y bañarlo con la sangre de los mortales a los que les extraigo los años gracias al plomo, como ofrenda a tu insuperable divinidad. Y construir un castillo con huesos de asado robados a los perros de la calle, e iluminarlo con las estrellas que no se hacen rogar para mirarte a vos y a nadie más. Me transformo en la tierra para que me pises y saltes en mi vientre para llegar a donde solamente vos podés; y soy aire para que vivas, y asi poder existir yo, cuya única función en vida que me complacería sería servirte como esclavo. Y profanar templos para desterrar religiones enteras para que solo te adoren a vos. Sangre de musas, carne de dioses, droga de demonios, vida mía.

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